Los desafíos planteados por el mundo actual a nuestra inteligencia a nivel personal, educacional, laboral, social son un gran desafío. La formación recibida por la mayoría de nosotros no fue orientada a conocer nuestro mundo interior y la relación que este entabla con su medio ambiente, por lo cual muchas veces nos vemos sometidos a situaciones que estresan y ponen en jaque las decisiones que tomamos.
El estrés y los trastornos emocionales están cada vez más a la orden del día y nuestro cerebro se ve expuesto a una serie de estímulos que superan su capacidad de respuesta.
Es absolutamente imprescindible que los seres humanos alcancemos capacidades como la automotivación, la perseverancia a pesar de las adversidades que se nos presenten. Lograr reglar nuestros impulsos emocionales, aumentar la empatía, manejar adecuadamente las relaciones personales, sentir esperanza y poder dar paso a nuestras capacidades de razonamiento harán una gran diferencia la hora de buscar máximos resultados y mayores logros.
Las investigaciones y descubrimientos en el campo de la biología humana y de las Neurociencias durante la llamada “Década del cerebro”, han posibilitado echar luz sobre nuestras conductas, motivaciones, vida en relación, aprendizaje, memoria, etc.
El Neuroliderazgo nos propone un campo nuevo, dedicado a explorar los procesos cerebrales de la toma de decisiones, los comportamientos e interacciones entre las personas, la posibilidad de desarrollar ambientes saludables a nivel personal y en las organizaciones.
El término Neuroliderazgo se ha incorporado rápidamente al mundo de las organizaciones y a la posibilidad de desarrollar habilidades humanas de liderazgo. Los conocimientos científicos sobre el cerebro humano han sido importantísimos aportando, desde las distintas disciplinas, a la gestión del cambio, capacitaciones, gestión del desarrollo de las personas, producción, bienestar corporativo, innovación y creatividad. Asimismo han aportado para conocer mejor el proceso de la autorregulación, y autogestión de las emociones, toma de decisiones, trabajo en equipo, consultorías y coaching entre otras.
El objetivo del Neuroliderazgo es colaborar con los individuos y las organizaciones en el desarrollo del potencial humano y en la comprensión de la UCCM (Unidad, Cuerpo, Cerebro, Mente) y cómo esta se relaciona con el medio ambiente circundante, para que todos logren desarrollar el máximo potencial y grupal.
En su afán de volverse más competitivas y generar mejores beneficios las organizaciones orientan un gran presupuesto y muchos esfuerzos en el desarrollo del managment. Pero, muchas de ellas, dejan de lado la salud mental y física de sus integrantes que, según estudios realizados en empresas de EEUU comportan gastos superiores que los destinados al managment.
Las personas enfermas o estresadas desarrollan sus actividades con mayores dificultades, menor rendimiento, menor compromiso, menor aporte de ideas creativas y ganas; y por supuesto, generando problemas internos en las relaciones personales.
El máximo rendimiento de las personas y de los grupos humanos se concreta cuando sus integrantes perciben un ambiente seguro, sin altos niveles de estrés, sin amenazas que lo lleven a preocupaciones y a desviar su atención de los objetivos planteados.
Con un alto nivel de estrés las personas dejamos de pensar. El cerebro necesita serenidad para funcionar. La mejor forma de gestionar el talento es gestionar el estrés, que es fundamental en el trabajo
En un ambiente enriquecido, las personas dan lo mejor de sí, se comprometen con los objetivos personales y los del equipo y así se logran mejorar los resultados finales de los objetivos planteados por las organizaciones.
Es aquí donde la figura del líder se convierte en importante. El líder es aquel que puede hacer que cada persona saque fuera lo mejor de sí, desarrollando todos los talentos personales en función del objetivo grupal.
Que este conozca el funcionamiento del cerebro humano, órgano en donde se asientan nuestras emociones y nuestra racionalidad, le dará posibilidades plantear estrategias y prácticas organizacionales que enriquezcan y favorezcan el bienestar y el desarrollo personal aumentando el compromiso de cada uno de los integrantes de la organización.
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